Recuerdo como si fuese hoy el día de todos los santos. De buena mañana tocaban el timbre y ya sabía que venía mi padrino a regalarme el “Rosari de tots els sants” o rosario de todos los santos que son unos collares engarzados con golosinas. Los niños los llevábamos colgados todo el día y nos íbamos comiendo los dulces poco a poco, a medida que avanzaba el día el cordel se veía más y más, aunque debo confesar que no he sido nunca muy golosa, era de las que iba repartiendo por aquí y por allá las piezas, solo me reservaba las de chocolate y los panellets, la fruta escarchada y otras golosinas no eran de mi agrado, aun así lo importante era ir con el collar todo el día, parecía una condecoración ja,ja…
De todos estos dulces destaco los panellets que tienen una larga tradición sirviéndose el día de los muertos en Cataluña, Valencia y aquí en Mallorca.
Como comenté anteriormente el exceso de dulce nunca me gusto, ni me parece sano, sin embargo, no hay que dejar de comer platos tradicionales solo transformarlos en algo rico y saludable.
La receta de hoy van a ser unos pequeños panecillos de mazapán rebozados con piñones, los panellets.
¡Vamos a la receta!
Ingredientes:
- 125 gr de almendras crudas.
- 70 ml de melaza de arroz o sirope de agave
- 40 ml de agua
- 40 ml de zumo de limón
- ½ cucharadita de canela en polvo
- Unas gotas de esencia de vainilla
- Ralladura de limón
- Piñones
Elaboración:
- Las almendras las pasas por un procesador de alimentos y las conviertes en harina.
- En un cazo pon la melaza de arroz o el sirope de agave, lo que prefieras, el agua y el zumo de limón, lo calientas hasta disolverse todo, luego incorpora la canela, la ralladura de limón y las gotas de esencia de vainilla.
- En un bol pon la harina de las almendras, junto al jarabe que hemos sacado del fuego y mezclamos muy bien.
- La masa la tapamos con un trapo y lo guardamos en la nevera unas horas para se asiente bien.
- Pasadas varias horas, encendemos el horno a 180º.
- Vamos haciendo pequeñas bolas de unos 25 gramos y las pasamos por los piñones, apretando un poquito para que se sujeten, si hay algún hueco se lo colocamos para que queden bien rebozados.
- Disolvemos una cucharada de melaza de arroz o de sirope de agave con un poco de agua y con un pincel los barnizamos.
- Colocados en una fuente de horno, mejor si le pones papel para hornear abajo, lo pones cinco minutos y luego en el gratinador si quieres unos dos minutos más para que tomen color.
- Vigila el horno porque los piñones se queman con facilidad.
La tradición dice que se tomen con una copita de mistela o vino dulce, un día es un día.