Tomar un mojito sentada en una roca frente al mar y ver como se pone el sol, es para mí uno de los momentos más mágicos que existen. Ser consciente de como finaliza el día para dar paso a la noche y saber que en otro lugar del mundo éste hecho ocurre, al contrario.
La primera vez que tome un mojito fue hace ya algunos años en la bodeguita de en medio en Cuba. El son cubano, el olor a habanos, las risas sinceras de la gente y la barra llena de vasos con hielo, hierbabuena y olor a ron me transportaron a otra época, pensé que estaba inmersa en una película de los años 50. ¡Me encanto!
¡Vamos a la receta!
Ingredientes:
Elaboración:
*Este mojito puede sustituir la soda por ron si se desea tomar alcohol*